En Bodegas Amador García este mes queremos compartir contigo uno de los momentos más importantes del año, la brotación del viñedo. Momento en el que la vid despierta tras el invierno. Este proceso inicia en primavera, en los meses de marzo y abril. Por la planta empieza a recorrer la savia, las yemas se hinchan y se alargan, surgiendo sobre los sarmientos los pámpanos – brotes verdes -.

Antes de la brotación, tiene lugar el fenómeno del lloro de la vid, que es la expulsión de savia por las heridas ocasionadas en la poda. Ha llegado el momento, ¡la vid está preparada para brotar y florecer de nuevo!

En el campo, estos meses se trabaja en evitar que aparezcan ciertas plagas o enfermedades: abonando la tierra, limpiando las hierbas de las viñas, atando los sarmientos y seleccionando aquellos que se dejarán crecer para dar vida a la nueva añada.

Este proceso es diferente dependiendo del tipo de uva y de la climatología. A lo largo del año, la vid pasa por diferentes estados que se repiten cada año: brotación, foliación, floración, fecundación y fructificación, envero, maduración y vendimia. Procesos en los que la vid se trata con mimo y cariño, para que el fruto llegue a su etapa final de la mejor manera posible.

Sin duda, es una maravilla poder apreciar en Rioja Alavesa como la naturaleza se abre paso para dar lugar a un nuevo ciclo anual.